LA CUAVES, COMO TAL, DEBE MORIR (I)

Ideas nuevas para problemas viejos

Walter Montañez Vargas

A puerta de que se elija un nuevo Consejo Ejecutivo Comunal de la CUAVES, de una organización que agoniza, es necesario reflexionar para no cometer los mismos errores de los dirigentes anteriores, que ahondaron la crisis. En ese sentido, es de mucha importancia saber lo acontecido en la CUAVES, principalmente en estos últimos 17 años. Y en base a ello, plantearnos propuestas viables para edificar una nueva organización territorial que defienda los intereses de los vecinos y, además, que contribuya con el desarrollo del distrito.

La otrora poderosa organización comunal “Comunidad Urbana de Villa El Salvador (CUAVES)”, que representaba a los vecinos en la defensa de sus intereses, en la actualidad, se encuentra en estado de “coma”. Debemos dejar que muera en paz, pues, desde hace tiempo, ya cumplió su ciclo de vida. Una cosa que envejece debe desaparecer, nada es perpetuo. Insistir en su sobrevivencia, como tal, en el nuevo contexto social, es aferrarse al pasado y a las viejas formas de hacer las cosas. Teniendo en cuenta estas consideraciones, la Comisión Reorganizadora dela CUAVES y el COELCE (1) elegido en el pasado mes de agosto, si no apuestan por el CAMBIO estructural de la CUAVES, harán “más de lo mismo”. Entonces, el cambio es inevitable y eso pasa por el diseño de un nuevo tipo de organización territorial con una nueva VISIÓN (que es lo que se quiere hacer) y un PROGRAMA (conjunto de acciones para hacer viable la “visión”) que concuerde con el actual escenario local, nacional e internacional. En lo mencionado, juega un papel determinante el LIDER estratégico como artífices del cambio, para lo cual, debe contar con la herramienta del conocimiento.

BREVE HISTORIA DE LA CUAVES (1994-20011)

Conocer el pasado histórico de la organización vecinal CUAVES nos va servir entender el presente y poder proyectarnos al futuro. Hay que tener en cuenta, entendiendo el pasado nos permite no volver a cometer los mismos errores en las acciones que podamos emprender. Debemos de tener presente, que la crisis de la CUAVES no vino de hechos repentinos, sino de procesos lentos y graduales, que comenzó a agudizarse a lo largo de estos últimos 17 años. Al respecto, los dirigentes que se sucedieron, en esos años, en el CEC de la CUAVES, donde hubo cuatro Consejos Ejecutivos Transitorios: 1994, 1998, 2001, 2007, no tuvieron la capacidad de solucionar la crisis de la organización comunal, por el contrario, lo ahondaron. Asimismo, se impulsó la VII (1998), VIII (2001) y la IX Convención (2006) que no tuvo los resultados esperados. Es más, sobre el caso, se constituyeron Comisiones, sin ton ni son; comisiones, en muchos casos, con diferentes nombre pero con el mismo objetivo, que fracasaron porque diseñaron una estrategia equivocada. A lo largo de estos últimos 17 años se constituyeron las Sgtes. Comisiones: Comisión de Reestructuración (1997); Comisión Estatutaria (cuatro veces): 1998, 2001, 2006, y 2007; Comisión Legal y Jurídica (1998), Comisión Especial Multisectorial (1998), Comisión Reorganizadora de la CUAVES ( 2007). Además, el pasado mes de agosto, se constituyó otra vez la Comisión Reorganizadora de la CUAVES y el COELCE, y existe la propuesta de elegir un CEC transitorio. En suma, podemos decir, los dirigentes elegidos últimamente, si no apuestan por el CAMBIO estructural de la CUAVES, seguirán los mismos pasos de sus antecesores, que fracasaron una y otra vez en su tarea.

La CUAVES, como organización social del pueblo de Villa El Salvador se fundó en la Segunda Convención, año 1973. Se constituyó como un proyecto político de desarrollo económico y social basado en la autogestión de la población (poder popular) como alternativa al capitalismo. Para su marcha, se elaboró un Estatuto, que fue aprobado en la primera Convención (27 y 28 de julio de 1973). Dicho documento fundacional respondía aun determinado entorno favorable, tanto a nivel local y nacional: Primero, los pobladores de VES querían satisfacer sus necesidades urgentes (agua, luz, transporte, educación, etc), por lo cual, los vecinos tenían la predisposición de organizarse y de movilizarse. Segundo, los pobladores, en su mayoría provincianos, muchos provenientes de comunidades campesinas, querían construir una ciudad autogestionaria y solidaria inspirados en las ancestrales formas del Ayllu andino prehispánico (cooperación comunal). Y, tercero, en el proyecto popular, se contaba con el apoyo del gobierno de Juan Velazco Alvarado, quien también estaba apostando por un proyecto de país diferente, lejos del modelo económico y político que EE.UU imponía a los países del tercer mundo para saquear sus recursos naturales.

La organización comunal CUAVES gobernaba al pueblo de Villa el Salvador hasta la aparición de la municipalidad (1983), a partir de ese instante, comenzó a perder poco a poco protagonismo por culpa de sus dirigentes que no supieron actuar en el nuevo escenario político-social por priorizar sus intereses personales. Debemos de recordar, cuando se creó la municipalidad, muchos de ellos (compañeros de izquierda), cuando se incorporaron a dicha institución, como autoridades políticas, se olvidaron de la lucha social, de su compromiso con el pueblo. No utilizaron el aparato municipal para fortalecer la organización vecinal. Este mismo comportamiento tuvieron los que entraron a trabajar, en ese entonces, al municipio mediante los “cupos partidarios”. El ser dirigente le sirvió como credencia (o merito) para ocupar una plaza. Podemos decir, entonces, los mejores cuadros, fueron ganados por el sistema imperante; ello generó, de cierta manera, un vacio de cuadros dirigenciales en la organización comunal, que se ahondó con el gobierno de Fujimori, 1990, al implementarse la política neoliberal en el país, donde el interés individual desplazó al interés colectivo, promoviendo con ello una sociedad fragmentada.

Vemos pues, por la carencia de lideres (dirigentes emprendedores), que apuesten al cambio, la CUAVES, está como está, en su fase terminal. Ello, se comenzó a sentir con mayor fuerza a partir de 1994, cuando finalizó el periodo del secretario general de la CUAVES, Filadelfo Roa. El periodo de Roa terminó accidentalmente, pues la asamblea de delegados, el 5 de mayo 1994, lo bajo al llano, en su remplazo se eligió el nuevo CEC presidido por Arnulfo Pardo, que luego fue desplazado por uno de los miembros del CEC transitorio, Luis García Tauma (2); poco tiempo después, Pardo, recuperó su cargo; su periodo terminó, cuando el COELCE (Comité electoral de la CUAVES), presidido por Juan Rojas Robles, eligió, en febrero del 95, al nuevo secretario general del CEC de la CUAVES, Claudio Espetia. El 14 de marzo de 1997, la asamblea de secretarios generales realizado en el local de la CUAVES bajó al llano al CEC de Espetia y elige la COMISIÓN REESTRUCTURADORA con facultades ejecutivas, que estaba compuesta por 21 secretarios generales, y cuyo objetivo era: Reestructurar a la organización comunal por la profunda crisis orgánica que estaba atravesando, y organizar la Convención Estatutaria, adecuándose a la realidad actual de VES (3).

La VII Convención de dirigentes, Agosto de 1998, ratificó el proceso de reestructuración de la CUAVES, habiendo nombrado para tal efecto: el CEC transitorio, por tres meses, presidido por Manuel Carrillo, con vigencia hasta el 31 de Dic. De 1998; la Comisión Estatutaria (para elaborar un nuevo estatuto de la CUAVES); el Consejo de Vigilancia y Fiscalización; y la Comisión Legal y Jurídica. En esta etapa, se genera una confrontación de los dirigentes contra Carrillo por la defensa del local comunal. El enfrentamiento sucedió por que el secretario general transitorio, Manuel Carrillo, firmó, en abril 1999, a espalda de los dirigentes (4), un contrato con la empresa ELECTRA S.A. para que se instale un centro comercial en el predio del local comunal de la CUAVES, por lo cual se demolió un área de 1000m2. Viendo que Carrillo distorsionaba los fines para el que ha sido destinado el local comunal, el alcalde Martin Pumar, en junio de 1999, mediante el Decreto de Alcaldía Nº 017, declara, al local de la CUAVES, como “Patrimonio Histórico” intangible.

Por la acción de Carrillo, la asamblea general de delegados de la CUAVES, el 13 de junio de 1999, dio por concluido las funciones de los dirigentes transitorios por haberse excedido la fecha de su mandato, y además por haber suscrito inconsultamente el Contrato de Usufructo a nombre de la Asociación Civil de la CUAVES sin fines de lucro (ficha registral 6840) con la empresa Electra del Perú S.A. Es más, en ese tiempo, ya existía, también, de los que componían dicha asociación, el interés de tramitar ante COFROPI (Expediente Nº 990001539) para apropiarse el local comunal (5). Si no lo consiguieron, es por que la Asociación Civil (ficha 6840), su directiva, no estaba saneado legalmente, desde el año 1991, en los Registros Públicos. En el propósito de Manuel Carrillo fueron apoyados por ex secretarios generales del CEC CUAVES (6). En remplazo de Manuel Carrillo, se nombró la Comisión Especial Multisectorial (Coordinadora Intersectorial), con vigencia hasta la convocatoria de la Convención Extraordinaria de dirigentes y pobladores con la finalidad de continuar el proceso de reestructuración y a fin de interponer denuncia penal y civil contra Manuel Carrillo y los miembros de la Asociación Civil CUAVES (7)

Los días 20, 21 y 28 de Nov. y el 05, 11, 12 , 19 de diciembre de 1999 se realizó la CONVENCIÓN EXTRAORDINARIA DE DIRIGENTES Y POBLADORES DE LA CUAVES, evento que se llevó a cabo dentro del marco de dicho proceso de reestructuración. Donde se debatió y aprobó el nuevo Estatuto de la CUAVES. Con el cual, el COELCE, presidido por Isabel Villavicencio Carrasco, eligió al nuevo Consejo Ejecutivo Comunal presidido por Román Naveda: 1999-2001 (8). La otra parte, principalmente, los que apoyaban a Carrillo, llevan a cabo también una asamblea para la elección de un nuevo secretario general de la CUAVES, saliendo elegido Héctor Castro (2000-2001). Como vemos, en un determinado momento tuvimos dos secretarios generales de la CUAVES, Naveda y Castro. Luego, en Nov. del 2000 ambos dirigentes, inician el proceso de unificación de la CUAVES con el fin de trabajar la VIII Convención.

Anexo:

(1) COMISIÓN REORGANIZADORA de la CUAVES, elegida el pasado 15 de agosto: Emiliano Huyhua, Miguel Tupalaya, Fernando Ramirez, Constantino Arauco, Alejandro Villaverde, Eleodoro Mayuri.

COMITÉ ELECTORAL DE LA CUAVES (COELCE), elegido el pasado 31 de agosto: Roel Valenzuela (Presidente), Nora Chumpitaz, Mirtha Egoabil, Alcides Mejía (Vocal), Héctor Castro (Vocal).

(2) Comunicado oficial Nº 010-94 CEC / CUAVES / 17 Nov. de 1994

(3 y 4) pronunciamiento público de la Comisión Reestructuradora /13 de abril de 1997

(5) Contrato con la empresa Electra, de fecha 17 abril de 1989; Documento de la Comisión jurídica de la CUAVES; Carta Notarial enviado a Manuel Carrillo por el Consejo de Vigilancia y Fiscalización de fecha 01 de junio 1999; Carta enviada al alcalde Martín Pumar, de fecha 18 de enero 2002.

(6) Julio Calle Herrera, Roel Valenzuela, entre otros ex ejecutivos de la CUAVES apoyaron en el propósito de Manuel Carrillo de hacer el contrato con Electra. S.A; a ellos se sumaron: Alejandro Villaverde, Rubén Quispe, Paula Gamboa (actual regidora), entre otros.

(7) Diario la República del 20 de junio de 1999; denuncia penal contra Edgardo Manuel Carrillo Holguín y los miembros de la Asociación Civil sin Fines de Lucro, ante el Fiscal Penal de Turno de Lima, de fecha 13 de junio 1999

8) Resolución Comunal Nº 001- COELCE- 13 enero del 2000

CONTINUARÁ